Queridas y olvidadas madres de adolescentes del mundo, ¡uníos!
Llevo años oyendo hablar de conciliación, esa necesidad intrínseca a la familia de poder compaginar vida laboral y familiar sin necesidad de renunciar a nada en ninguna de las dos facetas.
Se han creado grupos maravillosos que han puesto de manifiesto que aún queda mucho por hacer para lograr una CONCILIACIÓN...
Me hubiera gustado pertenecer a una familia con alta tradición espectral. De esas que conviven...